Fórmulas de copywriting para que tus textos no pasen desapercibidos.

Las fórmulas están para conocerlas y después romperlas. Sí, me parece el consejo más sabio que puedo darte. 

Aprender cuáles son las fórmulas básicas o más utilizadas para escribir un texto persuasivo es importante para comprender su estructura y razón de ser. Pero después… ¿tenés que manejarte solo dentro de esos parámetros sin correrte ni un milímetro? ¡NO! Al contrario, después viene lo más divertido: jugar, probar y romper las reglas. 

Cortázar conocía muy bien las normas y por eso podía romperlas a la perfección. 

Dicho esto, te presento algunas estructuras para tus copys que tenés que conocer sí o sí.

AIDA

Atención: la primera frase siempre debe llamar la atención del lector. Es el titular que invita a leer o a pasar de largo. No desperdicies ese primer encuentro con saludos o frases superfluas. Hacé hincapié en el punto de dolor del cliente, arrancá con una pregunta que vas a responder, usá números, generá curiosidad, etc. 

Interés: mantenelo vivo a lo largo del texto. Acordate que menos es más. Mucho adorno puede resultar confuso y aburrido así que andá al grano. El tiempo de los demás es valioso. 

Deseo: lográ que tu lector se visualice con la solución que le ofrecés para su vida. Que pueda sentirse con tu producto en sus manos o con todos los beneficios de tu servicio. Vos tenés que generarle el deseo de comprarte. 

Acción: acordate siempre de terminar tus textos con una llamada a la acción. Decile con todas las letras al lector lo que querés que haga: que te responda una pregunta, que visite tu tienda online, que se suscriba a un newsletter, lo que sea, pero DECÍSELO porque no es adivino.

PAS

Problema: en este caso, tenés que empezar mencionando ese problema (necesidad o deseo) que tiene tu cliente y que vos podés resolver o satisfacer con tu producto o servicio.

Agitación: ¿cuál es la emoción que ese problema le despierta? Esto te va a posicionar en un lugar empático, porque la persona se va a dar cuenta que sabés lo que siente. 

Solución: llegó el momento de mostrar el as que tenés bajo la manga. Contá de qué manera lo que vos ofrecés soluciona ese problema inicial. 

ADP

Antes: ¿cómo se siente tu cliente ideal antes de tener tu producto o servicio? ¿Qué necesita, qué le falta, qué se está perdiendo?

Después: ¿cómo se va a sentir después de comprarte? ¿Qué va a obtener, qué va a ganar?

Puente: mostrá tu producto o servicio sin miedos, es el puente que logró llevar a tu cliente desde donde estaba hacia donde quería estar. 

UN BONUS…

LAS 3 P

¿Por qué sos la mejor opción para el lector?: contale por qué no se puede perder la oportunidad de elegirte. ¿Cuál es tu diferencial? Por qué tiene que elegirte a vos entre tantas marcas que ofrecen lo mismo.

¿Por qué debería creerte?: Es el momento de brindar pruebas. Testimonios de clientes, cantidad de gente que ayudaste, tus conocimientos, el oficio o la profesión que te avala.

¿Por qué debería comprarte/accionar ahora mismo?: dale un motivo para que accione inmediatamente, aplicá las reglas de escasez y urgencia. ¿Hay pocos cupos, la oferta es por tiempo limitado?

Espero que te lleves estas herramientas para poner en práctica en tus textos de ahora en más. Y por supuesto: no te obsesiones con ellas. Una vez que las manejes, mezclalas a tu gusto y creá tu propio estilo, siempre midiendo que sea lo que funcione y a tu audiencia le guste consumir. 

Contame qué te parecen estas fórmulas y si ya las conocías…